Crimson Hero

Nobara Sumiyoshi no está de acuerdo con los planes que tiene su madre para ella, que no es otro que heredar el restaurante tradicional del que lleva haciéndose cargo la familia desde hace varias generaciones. Ella, menos femenina y dulce que su hermana pequeña, ha tenido una pasión desde pequeña por el voleibol, para el que posee una gran destreza y habilidad, aunque eso poco le importe a su madre, que no está dispuesta a que su primogénita abandone la tradición familiar por un simple deporte.

Pero eso no le importa a Nobara, que decide apuntarse a uno de los institutos con uno de los mejores equipos de voleibol de la zona, el instituto Benino. Sin embargo, su ilusión se trunca cuando descubre que el club de voleibol masculino es el que acapara el protagonismo y que ya no existe el club femenino debido a sus malos resultados.

Puestas así las cosas, Nobara decidirá refundar el antiguo club de voleibol pero no lo tendrá nada fácil. Parece que nadie desea unirse a un club que acabó desapareciendo por su bajo nivel y que no cuenta ni con el apoyo de la directiva del colegio, en parte sobornada por una cuantiosa donación realizada por cierto restaurante con el fin de evitar su reapertura.

Ante tal hecho, Nobara decidirá abandonar su casa, y pedirá ayuda a su tía, que desde hace tiempo vive alejada del resto de la familia y que además resulta ser la enfermera del instituto. Con tal de darle un sitio donde vivir, pero no su casa ya que resultaría una molestia, decide que Nobara se encargue de la residencia de estudiantes del equipo de voleibol masculino, idea que no será muy bien recibida por los miembros del equipo, al tener a una chica metida en la residencia.

A partir de entonces, Nobara deberá compaginar los estudios, las tareas de la residencia y el intento de refundar el club femenino de voleibol con todas sus fuerzas. ¿Será capaz de conseguirlo?

Personajes

Nobara Sumiyoshi. Esta estudiante de primero, poco femenina y en ocasiones confundida con un chico, ha sido una gran deportista desde su más tierna infancia, pero entre todos los deportes siempre ha sido una apasionada del voleibol, para el que parece tener unas grandes aptitudes. Su deseo de jugar es superior al deseo de su madre de heredar el restaurante familiar, y espera jugar algún día los campeonatos nacionales. Ello la mueve a apuntarse en un instituto con un prestigioso equipo de voleibol, pero para su sorpresa el equipo femenino ha sido disuelto hace tiempo por sus pobres resultados. Pero su tenacidad y confianza, que acaba contagiando a los demás, no le harán rendirse en su propósito de jugar al voleibol, y hará todo lo posible por refundar el club.

Yui Suzushiro. Capitana del antiguo club de voleibol femenino y alumna de tercer curso, no está interesada en la refundación del equipo, pues debe centrarse en los exámenes. Si bien Nobara le pide que vuelva a jugar, la dureza de los entrenamientos y la tristeza que sintió al tener que cerrar el club ante la falta de miembros le hacen que rechace la oferta. Pero con la insistencia de Nobara nada es imposible.

Ayako Mochida. Estudiante de segundo y antigua jugadora del equipo de voleibol, decide unirse a la causa de Nobara de rehacer el club, puesto que desde que lo ha abandonado ha ganado peso. Dotada de un fuerte carácter, que hace que muchas veces sea muy impulsiva o esté malhumorada, se convertirá en una de las mejores amigas de Nobara, en quien observa un enorme talento.

Tomoyo Osaka. Estudiante de segundo, durante su época junior llegó a jugar en la selección nacional de Japón de dicha categoría siendo una excelente colocadora, hasta que una inoportuna lesión de rodilla la apartó de las pistas. Desde entonces no ha vuelto a jugar en ningún equipo, al mismo tiempo que el equipo del Benino no colma sus expectativas.

Rena Komizo. Estudiante de primero y antigua jugadora de tenis, decidirá unirse al club de voleibol, a pesar de su nula experiencia, ante la admiración que le despierta Nobara. Si bien no es muy alta, posee unos grandes reflejos desarrollados en su anterior etapa de jugadora de tenis, a lo que se une un gran espíritu de sacrificio.

Kyoka Goto. Estudiante de primero y jugadora de voleibol en su etapa junior, se une al equipo al mismo tiempo que Rena. Chica reservada y poco destacada, es una jugadora muy regular que cumple a la perfección su cometido, gracias a su perseverancia.

Kanako Noda. Estudiante de primero y antigua saltadora de altura, decide unirse al equipo de voleibol para así poder estar cerca de los jugadores del equipo masculino. Dotada con una gran altura y mayor capacidad de salto, se convertirá en una jugadora muy aprovechable para el equipo, si bien rivalizará con Nobara por ser la mejor del equipo, dado su temperamento altamente competitivo.

Fumi Shima. Entrenadora del equipo femenino, dirige los entrenamientos con mano férrea con sus discípulas y si bien puede parecer antipática, sus esfuerzos van dirigidos a convertirlas en mejores jugadoras.

Yushin Kumanagi. Estudiante de primero y uno de los principales pilares del equipo masculino de voleibol, gracias a su combatividad y esfuerzo continuo, unido a una gran capacidad física. La entrada de Nobara en la residencia no le agrada demasiado, y tendrá numerosos roces con ella, pero aprenderá a apreciar su esfuerzo y devoción por el voleibol.

Keisuke Haibuki. Junto con Yushin, los dos grandes jugadores de primero del equipo de voleibol, siendo él posiblemente el mejor atacante del equipo gracias a su depurada técnica. Antiguo amigo de la infancia de Nobara, a quien admira gracias al apoyo que recibía de ella cuando todos le daban de lado en los deportes por su dolencia asmática. Es, además, el ex-novio de Tomoyo.

Nobara, tras los pasos de Juana y Julia

Cuando nos ponemos a hablar de voleibol dentro del mundo de la japanimación, dos nombres se nos vienen rápidamente a la cabeza, y son ni más ni menos que Julia Jara (Kozue Ayuhara en su versión original japonesa) y Juana Hazuki (You Hazuki), las protagonistas de dos de los mejores shojos deportivos de la historia de la japanimación que nos hicieron disfrutar de este deporte. Nos referimos, claro está, a La panda de Julia (Attack No.1) y Juana y Sergio (Attacker You!).

La aparición del voleibol como temática deportiva manga tiene su base en el año 1964. En ese año, se disputaron los XVIII Juegos Olímpicos en Tokio. En ellos, Japón obtuvo unos excelentes y brillantes resultados en el apartado de voleibol, obteniendo la medalla de bronce en la competición masculina y la medalla de oro en la femenina, lo que supuso un gran impulso para dicho deporte en Japón, que conseguiría buenos resultados en ediciones posteriores.

Este gran triunfo para el país fue rentabilizado por la mangaka Chikako Urano, que capitalizó el gran interés suscitado por el voleibol para crear Attacker Nº 1 (La panda de Julia) en 1968, obra que suponía una de las primeras grandes obras de género shojo dentro del manga, hasta entonces ocupado de forma dominante por el shonen, y que se consolidaría de forma plena por una generación de mangakas conocida como Grupo del 24, apelativo dado porque muchas de ellas habían nacido en torno al año 1949 (año 24 de la era Showa), y a la que pertenecen autoras como Moto Hagio, Riyoko Ikeda, Keiko Takemiya, Yumiko Oshima y Ryoko Yamagashi, que daban además los primeros pasos en subgéneros como el shonen-ai y el yuri.

Retomando el hilo inicial, la obra de Urano sentaba las bases del género gracias a las experiencias vividas por la protagonista, Julia. En las anteriores obras shojo, realizadas o bien por hombres o por mujeres y dirigidas a un público infantil y adolescente, la chica protagonista solía vivir recluida en el seno familiar para después abandonarlo y conocer a su hombre ideal para que éste le llevará de nuevo a la vida familiar. Esto no ocurría en el caso de Julia, que lejos de centrarse en el amor y sus visicitudes de forma primordial, es una joven preocupada por sus objetivos, sus inquietudes, y que desea labrarse un futuro por el que realizará cualquier sacrificio con tal de conseguirlo, y si bien el amor aparece, éste no debe ser un impedimento para alcanzarlo. Es, por tanto, una demostración de la existencia de la independencia femenina.

Estos mismos pasos los presentaba Juana Hazuki en la novela de Shizuo Koizumi de 1983 y titulada Ima, Shiro Tama ha Ikiru («El balón blanco vive»), que serviría de base para la creación del manga y el anime Attacker You, traducido en nuestro país como Juana y Sergio o Dos fuera de serie, que se presentaba algo más romántica, sobre todo en su inicio gracias a la personalidad fresca y divertida de Juana; más realista, alejándose de las piruetas y saltos inverosímiles que se veían en las acciones de Julia, pero igualmente con un gran componente feminista, centrando el protagonismo en una chica que lucha por su pasión por el voleibol y por descubrir quien era su madre oponiéndose a los deseos de sus padres para saber la verdad.

Siguiendo los pasos de Julia y Juana nos encontramos con Nobara, que desde el primer momento se erige como protagonista absoluta de la historia, siendo una joven decidida a triunfar en el voleibol por encima de los designios de su madre y sacrificando lo que sea necesario por poder jugar al deporte que tanto ama, incluso el amor si ello supone poner en riesgo su rendimiento o el del equipo que logrará crear con tantas ganas. Esperemos que el camino que elija sea tan exitoso como el de sus ilustres predecesoras.

La autora

Mitsuba Takanashi (prefectura de Shimane, 27 de mayo de 1985) es la joven autora de Crimson Hero. Debutó con sólo 17 años en el magazine Margaret de la editorial Shueisha, comenzando a destacar en 1997 con la obra Tenshi no Pocket («Un ángel en el bolsillo») y más aún en 1999 con la obra Akuma de Sōrō («El diablo existe»), que le aporta ya una relevancia internacional, pues la serie es publicada en países como Estados Unidos, Francia e Italia.

Entre 2003 y 2011, y manteniendo la tendencia de publicar para Margaret, realiza la serie Crimson Hero, de la que publicó 20 volúmenes en Japón.

Edición en España

Crimson Hero fue editada en España por Ediciones Glénat, catalogada como Shojo Manga, entre junio de 2007 y abril de 2012. Como es habitual, la edición de Glènat es más que notable, con papel de calidad y limpieza en la impresión, a un precio de 7’50€.

Resumen

Crimson Hero aprovecha las bases que todo buen manga deportivo debe tener, un protagonista con personalidad, ambición y gran pasión por el deporte que tanto practica, para desarrollar una historia llena de lucha, amistad, afán de superación y romanticismo, con momentos felices y sinsabores, que le aportan un plus de realismo y al mismo tiempo consiguen enganchar al lector gracias al deseo que genera en él de querer seguir la evolución de un elenco de personajes muy esmerado y carismático, y todo ello apoyado en un dibujo más que eficiente y un desarrollo de los partidos eficaz y sin lentitud ni prisa innecesarias. Un shojo deportivo sin igual en el panorama actual.

Nobara y su equipo te esperan en la pista