Corpulentos luchadores sometidos a experimentos con hormonas, agentes de la ley subordinados a intuiciones prostáticas, médicos rurales al servicio de la comunidad, samuráis llevados de pasiones demoníacas, señores y vasallos en componendas recíprocas, jóvenes imberbes y varones experimentados, severos profesores y disciplinados alumnos… Hombres, en definitiva, al más genuino estilo Tagame.
Un festival de virilidad, fluidos y pulsiones sadomasoquistas por cuenta de uno de los grandes maestros contemporáneos del manga homoerótico.
