En el Japón del futuro nadie tiene hijos, así que envían al pasado a un hada madrina a resolver la situación antes de que ocurra. Su solución es quitarle a Anzu, una chica con cero ganas de tener novio, lo que más quiere en este mundo: su gato, sus videojuegos y su chocolate. Por si eso fuera poco, también arrojará a su paso chicos guapos y clichés y situaciones de las obras románticas. Pero Anzu no está dispuesta a dejarse mangonear por un bichejo mágico hada madrina y mucho menos a enamorarse. ¿Lo conseguirá? Nuestro compañero Taichi ha estado leyendo este manga y nos lo cuenta, volumen a volumen.
Volumen 1
Anzu, estudiante de instituto, es una chica muy diferente al resto de sus amigas. No le interesa el amor, pues para ella sus aficiones (el chocolate, los videojuegos y su gato) son más que suficientes para ser feliz en el día a día.
Sin embargo, su vida dará un giro de 180º ante la aparición de Riri, un hada madrina del futuro, y no para bien precisamente. Riri viene de un futuro donde Japón tiene un grave problema de natalidad y ella ha sido elegida como sujeto de un programa experimental, que busca emparentar a jóvenes para aumentar la natalidad.
Para fomentar su búsqueda de pareja, Riri dejará sin sus aficiones a Anzu quien, a pesar de los esfuerzos de la hada, evitará enamorarse a toda costa.
Uno de los mangas más divertidos de estos últimos meses, que conocía previamente gracias a su adaptación al anime, que puede verse en Netflix. Humor a raudales con pequeños toques románticos que nos enganchan desde el primer momento, gracias al carisma de una protagonista diferente a la habitual de las comedias románticas. Refrescante.
Volumen 2
Gracias a las artimañas de Riri, Kazuki convivirá en la misma casa con Anzu durante una temporada, intentando que surja algo entre ambos y conseguir finalmente su objetivo.
Sin embargo, Anzu mantiene su veto al amor y no muestra interés por Kazuki, aunque desarrolla una buena relación de amistad con él. Esto obligará a Riri a forzar un poco más la situación con otra buena maniobra para hacer que Junta, el amigo de la infancia de Anzu, también viva bajo su mismo techo. ¿Quién dijo que tres son multitud?
Romantic Killer es una de las mejores comedias románticas actuales en el mercado, y lo es gracias al humor y frescura que contiene. Personajes divertidos, situaciones absurdas y una pizca de romanticismo se mezclan de nuevo, manteniendo las buenas sensaciones transmitidas previamente, al mismo tiempo que nos sigue dejando con la duda sobre que sucederá con Anzu y si finalmente elegirá a alguno de sus potenciales candidatos. Divertidísima.
Volumen 3
El plan de Riri sigue su curso y Anzu, Kazuki y Junta empiezan una convivencia en la casa de Anzu, para alegría de los tres, cada uno por sus motivos: Anzu por la compañía y amistad con ellos; Kazuki por la tranquilidad y confianza que ella le transmite y Junta por sus sentimientos amorosos.
En esta tranquilidad, Anzu descubre accidentalmente una posible cita de Kazuki con una chica llamada Arisa. Sin embargo, sus sospechas se resolverán rápidamente cuando descubra que Arisa es la hermana de Kazuki. Al conocerla, descubrirá un poco más de las razones del comportamiento introvertido de este, quien le prometerá contarle la verdad acerca de su pasado.
Y para seguir liando un poco más la cosa, Anzu se reencuentra con antiguas amigas de secundaria. En este reencuentro sale a la palestra el nombre de Junta y así descubre que un viejo amigo de la infancia llamado cariñosamente Tonta es en realidad Junta, por lo que no resultaba ser una amistad inventada e impuesta por Riri. ¿Cómo reaccionará Anzu ante ello?
Esta corta pero divertidísima serie sigue contando historias cargadas de humor, momentos inoportunos, desenlaces inesperados y también pequeñas dosis de romance, consiguiendo un cóctel muy exitoso. Cada capítulo es una sorpresa, con momentos imposibles e incluso disparatados, que consiguen el objetivo de hacernos reír sin remedio. Esperemos que el 4º y último tomo nos proporcione un final acorde y digno a su peculiar recorrido. Éxito asegurado.
Volumen 4
¡Han llegado las vacaciones de verano! Y, por supuesto, Anzu tiene pesando pasarlo genial con todos sus amigos, por lo que deciden acudir al festival de verano que se celebra. Aunque Kazuki no quiere acudir, la insistencia de Anzu terminará por convencerlo.
La actitud siempre reservada de Kazuki quedará por fin explicada cuando aparece Kishi, una acosadora de Kazuki que consigue localizarlo gracias a una fotografía ocasional hecha durante el festival. Ante su extraña aparición frente a su casa, Anzu desconfía de ella al ver la reacción de Kazuki. Por todo ello Kazuki, finalmente, abre su corazón a Anzu, contando su triste y oscuro pasado, uniéndolos un poco más.
¿Qué hará Kishi ahora que ha localizado a su amor? ¿Acabará Anzu por enamorarse de Kazuki? ¿Dejará Junta que eso suceda? ¿Que dirá Hijiri sobre todo esto? ¿Conseguirá Riri su misión?
Todas estas preguntas tendrán sus respuestas en este tomo final de la serie. Quizá algunas de ellas no os gustarán, aunque sí son justas y acordes a la esencia de la historia.
Estamos ante una historia tremendamente divertida y fresca, con una auténtica antiheroína que huye del amor por más que se empeñe su hada y todas las situaciones que provoca y por más que esté rodeada por un buen grupo de protagonistas masculinos, todos ellos con sus matices pero que se ganan a lector de un modo u otro. Esperemos que este tomo sea un punto y seguido. Divertidísima.