Ryôta es hospitalizado de urgencia debido a un incidente inesperado. Mientras él se debate entre la vida y la muerte, dos madres esperan en el pasillo a que despierte.
Sin embargo, Harumi, la madre de Nakamura, se enfurece ante el egoísmo de Rika, que ruega porque no haya sido su hijo y concluye que el culpable es Seiya.
Cuando queda claro que el chico no necesita dos madres, ¡empieza la guerra entre las dos!